Francisco Villa (mejor conocido como Pancho Villa), uno de los
protagonistas más famosos de la Revolución Mexicana, fue también un
bandido. Este es un relato minucioso de esos 16 años que no han sido tan
difundidos. Gran parte de este interesante libro contiene material que
se da a conocer por vez primera, como: - La correspondencia entre Madero
y Villa cuando éste estaba en la cárcel; la de José María Flores para
Porfirio Díaz; y la de Enrique Creel para José María Sánchez, entre
otros. Además, el autor entrevistó a descendientes directos de personas
que conocieron y estuvieron cerca de Villa, para dar cuenta de la
infancia y adolescencia del general de la División del Norte. También
narra pasajes que la historia ha dejado de lado, desde su niñez hasta
aquellos que explican lo que forjó a Francisco Villa como
revolucionario: - De niño, Villa se dedicaba a cortar madera y tenía
gran aprecio por los animales. - Estaba en contra de la injusticia, por
lo que comenzó a robar ganado. No era por avaricia, quería defender al
pobre. (Desde su primer robo fue identificado: decidió robar de nueva
cuenta el ganado que ya había vendido para regresarlo al primer
dueño.) - La amistad que tuvo con Ignacio Parra, siendo éste quien le
enseñó a ser un bandido. - Cómo traicionó a Madero. - Cómo influyó este
periodo para volverse un genio militar, entre otros. Una obra que
enriquece los claroscuros de la vida de una de las figuras más conocidas
y admiradas en México. La defensa del pobre a costa de la traición.