Como creyente, usted sabe que necesita tener su devocional. Se lo ha
escuchado decir a su pastor, lo ha visto en las guías de estudio; tal
vez incluso este tiempo ha dejado alguna huella en su lectura de la
Biblia en un año. Algunos han ajustado con valentía su despertador para
que suene una hora antes a fin de tener su devocional en la madrugada,
solo para hallar que la vida se las arregla para privarle de su
decisión. No se trata de que no ame a Dios. Usted renuncia porque «se
dejó convencer» para seguir el hábito insostenible de alguien más y a un
ritmo irrazonable.Sin embargo, no tiene que seguir avanzando con el
tanque de combustible vacío. El exitoso autor Doug Fields le ofrece un
plan nada complicado y funcional que puede llevar a cabo. Este libro no
le va a enseñar cómo «embutir a Dios» en su calendario ya lleno. Más
bien, Doug le mostrará una manera práctica y factible de poner a Dios
primero y luego permitir que todo lo demás en su vida caiga en su lugar.
Experimentará la plenitud que Dios tiene para usted tan solo dedicando
algún tiempo para reaprovisionarse de combustible.