Aunque el Wunderteam no compitió a lo largo de muchos años, esta
Selección de Austria dirigida por Hugo Meisl -una de las figuras más
destacadas del fútbol europeo- generó una enorme influencia. Viena se
convirtió con celeridad, junto a Budapest y a Praga, en una de las
capitales mundiales del fútbol y fue la cuna de algunos de los mejores
jugadores de la época, como Matthias Sindelar, un delantero centro cuya
fama trascendió el deporte, y que a menudo fue comparado con Wolfgang
Amadeus Mozart y otras celebridades del país.
El libro conduce al lector a un viaje por esa época exquisita pero
olvidada, examinando la génesis del conjunto de Meisl, sus figuras
clave, su momento cumbre, las difíciles circunstancias históricas de los
años de entreguerras y los equipos vieneses más importantes de aquella
etapa detenida en el tiempo.